HERRAMIENTAS PARA TOMAR DECISIONES PRECISAS EN EL CONTROL DE MALEZAS

La Agricultura Digital nos abre un nuevo horizonte para recabar información precisa a campo, pero para ello es fundamental respetar ciertos procesos. 

¿Cómo utilizar la gran diversidad de herramientas que nos brinda la Agricultura Digital para mejorar el control de malezas y ser más eficientes en el uso de agroquímicos? Es una gran pregunta, y evidentemente no existe una única respuesta. En la presente publicación pretendo expresar mi punto de vista, fruto de más de 10 años de trabajo con experiencias en implementación de tecnologías en los monitoreos de lotes agrícolas.  

En la Imagen 1 se enumeran los pilares fundamentales para realizar un monitoreo preciso. A continuación, se describirán cada uno de ellos, haciendo especial énfasis en la representatividad de los datos recolectados, y en cómo gestionarlos para convertirlos en información.

1) IMAGEN MULTIESPECTRAL

Realizar la recorrida con una imagen multiespectral como guía resulta fundamental para tener una visión holística del estado general de la unidad productiva, y así poder hacer foco en situaciones problemáticas y eficientizar los tiempos del operario que realiza el monitoreo.

Las imágenes multiespectrales especialmente útiles son:

• NDVI o Índice Verde;
• NDRE o Borde Rojo, siendo especialmente útil para monitorear cultivos de gramíneas debido a su alta correlación con el contenido de Nitrógeno en planta.
• EVI y SAVI: especialmente útiles en la etapa de barbecho químico, cuando la población de malezas presenta escaso desarrollo y en las etapas iniciales de cualquier cultivo.
• Zonificaciones utilizando cualquiera de los índices multiespectrales mencionados anteriormente, siendo particularmente ventajosas las zonificaciones clusters.

2) RECOLECCIÓN DE INFORMACIÓN A CAMPO

Una vez que disponemos de la imagen multiespectral conveniente, y un dispositivo móvil (celular o tablet) con suficiente autonomía de batería, es muy importante respetar los siguientes puntos a la hora de recorrer el lote y recabar los datos georreferenciados.

2.a) Recorrida representativa

A la hora de determinar las estaciones de monitoreo, es relevante recordar que la situación que suele encontrarse en cabeceras de un lote suele ser diferente a lo que sucede en el interior del mismo. Debido a esto, es trascendental no olvidarse de recolectar datos tanto dentro del lote como en las zonas cercanas al perímetro de cada unidad productiva.

Si es posible, se recomienda planificar los sitios a visitar previamente, y confeccionar un mapa con las estaciones virtuales de monitoreo (EVM). La ventaja de esto es hacer más representativa la recorrida y, además, estas EVM servirán para la re-visita de dichos puntos en un futuro y determinar el resultado de un posible tratamiento con fitoterápicos, por ejemplo.

Es importante aclarar que en caso de usar EVM, el monitoreador debe registrar cualquier otro sitio que resulte importante documentar, aunque no esté dentro de las EVM.

2.b) Información objetiva

Para que todos los interesados puedan conocer e interpretar correctamente el resultado del monitoreo, es muy importante disminuir al mínimo posible la subjetividad de los datos recolectados.

Además, siempre resulta conveniente complementar el dato medido con una fotografía que comprenda el área monitoreada. 

3) GESTIÓN DE LA INFORMACIÓN

Con el objetivo de que todos los usuarios puedan acceder a la información recabada durante el monitoreo, es fundamental que la misma se centralice en un único lugar donde los interesados tengan a acceso. Para ello, son particularmente útiles las plataformas web de GIS. A partir de éstas, se podrá disponer de la información georreferencia histórica correspondiente a los datos de cada recorrida, lo cual resulta útil, muchas veces, para encontrar explicaciones a la variabilidad de los rendimientos intra-lote una vez que ya ha pasado la cosechadora y de esta manera relacionar lo observado durante el monitoreo y el rendimiento final.

Además, los softwares GIS son particularmente útiles para procesar los datos registrados a campo. Por ejemplo, si lo sitios de muestreos son los suficientes y están bien distribuidos con respecto a la superficie monitoreada, es posible generar mapas interpolados que permitan fácilmente observar la distribución espacial de cada maleza problema (ver Imagen 4 e Imagen 5).

5) TOMA DE DECISIÓN

Una vez realizados todos los pasos anteriores, llega el momento de tomar la decisión: ¿aplicamos inmediatamente o esperamos?

Para ello es útil expresarlo en términos de los colores del semáforo. En la Imagen 6 se puede ver una tabla con la población de malezas consideradas como difíciles en una gran región del norte argentino, y un criterio para tomar decisiones en aplicaciones selectivas (WeedIT o Weed Seeker). Obviamente, en caso de haber presencia de malezas de diferente dificultad de control, tomar la decisión en función de la maleza que está más arriba en el listado.

Por último, es necesario remarcar que, como consecuencia de encontrar diferente población y abundancia de malezas en cabeceras respecto al interior del lote, muchas veces es necesario preparar mezclas diferentes para ambos casos, o variar la dosis de aplicación según la situación encontrada. 

Autor: Ing. Agr. Juan Carlos Cotella* e Ing. Agr. Ezequiel Krieger Marin**

*Productor agrícola en NOA y NEA.

** Gerente de Producción en Suri Yaco SRL y asesor en Agricultura Digital.